Es un poco difícil su localización, por tanto, su búsqueda debe ser minuciosa y es muy probable que se confunda entre los cabellos o vellos del victimario y los de la victima; sin embargo, se deben recopilar a fin de establecer la relación de presencia del sospechoso en el lugar o intercambio con la víctima.
miércoles, 18 de abril de 2012
SALIVA
Este fluido suele estar más presente en la victima, pero aun así, no debe descartarse su presencia en elementos u objetos que se encuentren en el lugar; por ejemplo, en colillas de cigarrillos, ceniceros, vasos, residuos de comida u otros.
FIBRAS
Tal vez es una de las evidencias trazas más difíciles de encontrar, puesto que se pueden confundir con fibras existentes en las prendas u otros materiales de la víctima o el lugar; en ellos desempeña un papel muy importante la declaración de la víctima, sobre lo que recuerde en detalle sobre lo sucedido.
ORINA Y/O MATERIA FECAL
Es posible que el victimario haya tenido el tiempo suficiente para dejar este tipo de residuos fisiológicos, pues ello puede ser producto de las conductas primitivas o fuertes económicas.
HUELLAS
Se podrían encontrar diversas clases de huellas, entre ellas: dactilares, pisadas, neumáticos de vehículos. Estas evidencias suelen dar indicios que tienden a demostrar la presencia de un sospechoso o elemento en el lugar de los hechos.
PIEL
Los residuos de la piel se pueden encontrar cuando ha habido forcejeo, lucha, resistencia o defensa, con mayor frecuencia bajo las uñas de la víctima, y por ello se deba acompañar de la búsqueda de lesiones en el sospechoso (cuando lo haya o se localice).
MORDEDURAS
Son ocasionales en el victimario pero frecuentes en la victima, por tanto, este tipo de evidencia debe ser fijado fotográficamente o si es posible moldeado; esta evidencia transmítelas características dentales del agresor las cuales pueden setr comparadas posteriormente.
Las anteriores posibles evidencias son frecuentes, pero no son las únicas, se pueden encontrar otro tipo de evidencias, pero se hace necesario enfatizar, que en los delitos sexuales de acceso carnal violento, por el solo hecho de ser violentos causan con frecuencia en la victima daños físicos, pero con mayor énfasis daños psicológicos.
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